Al existir la ausencia de esta proteína en la alimentación, las personas intolerantes al gluten, los celiacos e incluso aquellas que padecen del síndrome del intestino irritable pueden observar como los síntomas desaparecen o son mitigados al punto que los daños producidos al intestino delgado comienzan a regenerarse y todos los estragos causados al organismo pueden contrarrestarse.
No obstante, las personas con algún trastorno relacionado con el gluten, deben acudir con su médico de cabecera, quien hará la respectiva evaluación y determinará si es correcto empezar una dieta sin gluten, y eliminar aquellos productos que sean elaborados a base de esta proteína que principalmente se encuentra presente en cereales como el trigo, la cebada, el centeno y un cruce entre el trigo y el centeno conocida como triticale, también hay que descartar varios productos de consumo diario como la pasta o el pan.
Aunque, llevar este estilo de vida, te ofrece múltiples beneficios que van desde la desaparición de los síntomas relacionados con la intolerancia al gluten, así como una reducción en el riesgo de complicaciones asociadas con problemas de la salud.
Pero, eso no es todo, en muchos casos los efectos de la dieta sin gluten se hacen evidentes en tan solo unas semanas tanto así que los síntomas y el estado de salud de la persona mejoran considerablemente. Asimismo, los beneficios obtenidos para los niños celiacos van desde la recuperación del crecimiento, la pérdida de peso e incluso logran normalizan los anticuerpos en su organismo. Además, en las personas con este tipo de trastornos, la mucosa del intestino delgado se regenera y así los nutrientes son absorbidos nuevamente.
De igual manera, al seguir estrictamente una dieta sin gluten mejoran otros aspectos de tu vida como la reducción en la presión sanguínea, la disminución en el colesterol y los triglicéridos; también hay una mejora en la salud capilar y cutánea.
¿Cómo es esto posible? Al seguir una dieta sin gluten en la que se evita el trigo y otros cereales, las personas pueden escoger sustitutos que brinden los nutrientes necesarios y requeridos por el organismo y que influyen directamente en su estado de salud al incrementar el consumo general de vitaminas y fibras en su alimentación.
Existen una gran cantidad de alimentos que no contienen gluten y que pueden formar parte de una dieta saludable, por lo que aquellas personas intolerantes al gluten tienen un gran abanico de opciones para escoger. Su alimentación básicamente iría vinculada a la ingesta de frutas, vegetales, frijoles, semillas y frutos secos sin procesar.
Igualmente, pueden consumir huevos, carnes magras, pescado y carne de aves siempre que estén sin procesar, de lo contrario, podrían sufrir una recaída que ocasionaría la reaparición de los signos y síntomas que tienen relación directa con la enfermedad celíaca y otras enfermedades vinculadas con el gluten, de manera que es esencial mantenerse bien informado sobre esta enfermedad para evitar exponerse a la temida contaminación cruzada u otro factores.
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